martes, 1 de julio de 2014

Romerillo / Mío mío

Baccharis coridifolia D.C. / Romerillo
Familia: Asteraceae.
"Asteraceae: El nombre de la familia tiene su origen en en el género Aster L., que significa en griego 'estrella', aludiendo a la forma estrellada de los radios del capítulo." (González, J.: “Explicación Etimológica de las Plantas de la Selva”, Flora Digital de la Selva, Organización para Estudios Tropicales).
Baccharis, nombre genérico derivado de bacchus, Baco, dios romano del vino, por el característico olor a especias de las raíces de algunas de las especies, que en la antiguedad se consumían con vino; el epíteto coridifolia del latín coridifolium, hojas de consistencia coriácea.
Sin. Baccharis montevidensis Sch.Bip. ex Baker; Eupatorium montevidense Spreng.
Origen: Autóctono.

(imagen de base portal Árboles Nativos)
Nombres comunes: Ajenjo de campo, Hierba mala, Hierbamala, Mío, Mío mío, Míomio, Neomo, Neo neo, Nia, Nío, Nío nío, Niyo, Ñío ñío, Romerillo, Yerba mala, Yerbamala. Alecrim do mato, Mio mio, Vassourinha (portugués). 
PIARFON refiere: "Descripción general: Hierba perenne o sufrútice dioico, de 50 a 80 cm de alto, ramoso, glabro y densamente hojoso. Hojas simples, sésiles, lineares, de 1,5 a 2,5 cm de longitud y 1 a 2, 5 mm de latitud. Flores reunidas en capítulos pequeños, numerosos, dispuestos en racimos en el ápice de los tallos. Capítulos masculinos con involucro acampanado de mm de alto. Capítulos femeninos con involucro de 4 mm de alto. Fruto cipsela, pubescente, con papus blanco o rojizo, acrescente.
Distribución y ecología: Especie de Bolivia, Brasil, Paraguay, Uruguay. Frecuente en todo el territorio argentino. Habita sabanas, estepas y suelos arenosos; de color siempre verde, semejante al romero, del que proviene uno de sus nombres vulgares. Es resistente a las sequías y a los calores fuertes, siendo más tóxica cuando finaliza su fructificación.
Fenología: Florece desde fines de primavera y durante el verano, fructifica en otoño.
Usos: la decocción de la planta era utilizada por los indios toba para evitar la infección de heridas en los caballos. En caso de "bicheras" se aplicaba la decocción en la zona herida.
Según Hierónymus (1939), emplastos de gajos triturados y mezclados con grasa, se empleaban para tratar golpes y manqueras en los animales.
Observaciones: Hasta el presente no se conoce con exactitud cuál es el principio tóxico que contiene. Se supone que la toxicidad del"romerillo" se debe a la absorción radicular de una toxina producida por un hongo del género Myrothecium que se desarrolla sobre el suelo. Por tal motivo es considerada una planta indeseable en campos dedicados al pastoreo por ser tóxica para el ganado bovino, caballar, caprino y ovino que la consume. Su ingestión produce el efecto de un veneno irritante sobre el tubo gastroentérico. Algunos de los síntomas más comunes son: los animales se revuelcan o se echan de lomo, debido a los fuertes dolores de estómago, despidiendo por la boca una espuma verdosa. En general, la intoxicación con romerillo se produce principalmente en animales criados en zonas libres de esta especie. Una práctica aconsejada para evitar su consumo es quemar matas y pasar el humo por las narices de la hacienda, para evitar la ingestión de la planta; otro método que busca el mismo fin es refregar una mata tierna por las encías de los animales."
(Ficha elaborada por: Pensiero, J. &Gutiérrez, H. - PIARFON, Monte y Espinal, Área Etnobotánica).

En la guerra civil entre unitarios y federales de las Provincias Unidas del Río de la Plata (hoy Argentina), la batalla de
Carrizales librada en la provincia de Santa Fe, fue escenario del "Combate de mío mio", en el cual la protagonista principal fue una planta tóxica, maleza propia de la zona (Baccharis coridifolia), que finalmente determinó un triunfo que parecía perdido para el brigadier Estanislao López contra el general Juan Lavalle, en el enfrentamiento entre unitarios y federales. 

"López, sabiéndose en inferioridad de condiciones para enfrentarlo logró atraerlo hasta la zona de la cañada de Carrizales, una región donde abunda una vegetación conocida como Mío Mío o romerillo.
López sabía que esas plantas tienen propiedades curativas, pero sólo cuando son ingeridas en la proporción justa, de lo contrario mata al ganado después de tomar agua.
Con esos datos, López le puso morrales a sus caballos para que no comieran durante toda una noche, mientras esperaba la llegada de Lavalle con unos 600 animales exhaustos por la travesía. La estrategia dio resultado y menuda fue la sorpresa de los unitarios cuando a la mañana siguiente encontraron muerta a toda la caballería. Fue entonces cuando las tropas de López atacaron ferozmente y Lavalle quedó con un ejército maltrecho. La victoria de los federales —que la historia luego la bautizó como la Batalla de Mío Mío— no hubiese sido posible sin la sapiencia del brigadier, que supo sacar ventajas de su conocimiento sobre el terreno."
(Crónicas regionales: "Carrizales, una batalla casi olvidada", Marcelo Abram, en poderlocal.net/)

"La suerte de aquella batalla, y tal vez de la guerra que le siguió, se decidió, como señalamos antes, no por el peso masivo de la estructura militar sino por una estrategia de dislocación del enemigo basada más en la astucia y el conocimiento que en el peso de la estructura militar." (Prof. Dr. Eduardo Scarlato, Dr. Jorge Zanardi: "EL MIO MIO. LA PLANTA DE LA DISCORDIA", Boletín de la Asociación Toxicológica Argentina. (Adherida a la IUTOX). Año 21, Nº 78/79. 2008).

Como contrapartida de las muertes ocasionadas por el consumo de esta planta por parte del ganado, hay noticias de investigaciones recientes de su empleo para salvar vidas en la lucha contra el cáncer:

Vínculos

"Aportes al Conocimiento de las Plantas Tóxicas para el Ganado en la Provincia de Jujuy", Sitio Argentino de Producción Animal.
La Historia Olvidada: Batalla del Mio Mio (Carrizales/1829); EL BALDÍO, Cultura y Política en la periferia.

1 comentario:

  1. El Dr. Edelmar Siqueira tiene 59 años de edad. Es oriundo de Treinta y Tres, este es el Dr. no el que dice aquì, SOY DE URUGUAY.
    Saludos.

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