Artocarpus heterophylla Lam./ Yaca / Árbol del pan
Nombre genérico "Artocarpus" derivado del griego artos (pan) y karpos (fruto), en referencia a las propiedades nutritivas que se le atribuyen; el epíteto heterophyllus, de heteros (variado) y phyllon (hoja), de hojas variadas.
Yaca en Resistencia, Chaco (Mitre 700 / 800)
Familia: Moraceae.
"Moraceae: El nombre de la familia tiene su origen en en el género Morus L., que a su vez tiene su origen en una palabra de la lengua celta, que significa "negro", aludiendo al color de los frutos maduros de M. nigra L." (González, J.: “Explicación Etimológica de las Plantas de la Selva”, Flora Digital de la Selva, Organización para Estudios Tropicales).
Nombres comunes: Jaca; Jaka; Jaqueira; Árbol de Jack; Jackfruit; Panapen; Langka; Nangka.
El nombre inglés Jackfruit deriva del portugués jaka que a su vez deriva del malayo chakka.
En el sur de la India hay dos variedades: Koozha chakka (pulpa blanda) y Varika chakka (pulpa firme). (Jackfruits, Wikipedia).
Según referencias de la Agencia cubana de noticias su nombre en tongano: mei; en samoano y hawaiano: ulu; en tahitiano: uru; en maorí: kuru y en algunas partes de Centroamérica: mazapán.
Origen: India y Malasia
Es un árbol de porte mediano con tronco castaño grisáceo, liso en ejemplares jóvenes y rugoso en los adultos; tiene follaje verde oscuro de hojas ovaladas, más lustrosas en su cara superior y con nervaduras más claras.
Flores masculinas en espigas y femeninas agrupadas en inflorescencias globosas que surgen del tronco y ramas gruesas, para luego transformarse en frutos que, en sus zonas de origen, pueden llegan a superar los 20 kilogramos de peso.
Estos frutos son verdes en un comienzo y se tornan amarillentos al madurar, tienen su superficie cubiertas de pequeños conos.
En nuestra zona fructifica hacia fines de primavera.
"El árbol del pan"
*del "Libro de los pecados, los vicios y las virtudes", de Ana María Shua).
"En una choza, cerca del bosque, vivía un anciano con su hijo, su criado y su perro. Vivían humildemente y nadie se interesaba en ellos, pero eran amados por Brahma, el omnipotente, el compasivo.
Un día comenzó a caer una lluvia torrencial. Era la temporada lluviosa y parecía que iba a llover eternamente. Los habitantes de la choza no se atrevían a salir y todo lo que tenían para comer eran cuatro grandes hogazas de pan, con lo que esperaban subsistir hasta que terminase la lluvia.
Una de esas noches de tormenta, cuando los tres hombres estaban sentados a la mesa y el perro dormía a los pies del su amo, golpearon la puerta. Era un mendigo que rogaba un pedazo de pan. El viejo abrió el arca donde guardaba el pan y sin un instante de duda le dijo a su criado:
- Dale a ese hombre mi pan: es más desgraciado que yo, porque ni siquiera tiene techo que lo proteja. El dios Brahma velará por nosotros.
Con pocas ganas, el criado le entregó el pan al mendigo, que se alejó entre bendiciones.
Pasaron siete días de lluvia sin que amainara la tormenta y otra vez apareció el mendigo, miserable y hambriento.
- Dale tu pan - dijo el anciano a su criado - Él es viejo, tu eres joven. Ayuda al desgraciado y Brahma te premiará.
Con más alegría de la que tenía cuando entregó el pan de su amo, el criado dio su pan al mendigo.
Pero la lluvia no cesaba y cuando, transcurridos siete días, el vagabundo volvió a golpear la puerta de la choza, sus habitantes se encontraban en gran desolación y desamparo. Sin embargo, el anciano tuvo fuerzas para tomar una triste resolución:
- Dale a este hombre el pan de mi hijo - le ordenó - y demos gracias a Brahma que permite que un niño tan pequeño aprenda como ayudar al prójimo.
Pasaron otros siete días de angustia y nuevamente se presentó el mendigo, hambriento y desesperado.
- No nos queda más que el pan del perro - dijo el noble señor - Bendito sea Brahma, que nos permite aliviar con algo el hambre de nuestro hermano. Es justo que se sacrifique ahora el animal, aunque no pueda gozar de su buena obra.
Y cuando el servidor estaba entregando la hogaza de pan al mendigo, sucedió el milagro.
Los sucios ropajes cayeron y una luz resplandeciente lo envolvió. Y en lugar de un viejo cansado y miserable, apareció el dios Brahma, en su eterna fuerza y juventud.
El dios entregó al criado una semilla del tamaño de una almendra y le dijo:
- Que tu señor la siembre. Crecerá un árbol y sus frutos darán alimento. Quienes socorren al necesitado están bajo la protección de Brahma.
Cuando el criado relató lo que había sucedido, el anciano y su hijo corrieron a a la puerta, pero ya nada vieron. Sin embargo, la semilla estaba ahí. Y las grandes lluvias habían terminado.
El anciano sembró la semilla en lo alto de una colina, agradeciendo y adorando a Brahma.
Una lluvia cálida y bienhechora humedeció la tierra cuando fue necesario. Un tallo duro creció subiendo recto hasta formar un fuerte tronco. Y entre las ramas del árbol aparecieron cuatro panes blandos y sabrosos.
Así, como un don de Brahma, nació en la India el primer árbol del pan." (Shua, Ana María: "Libro de los pecados, los vicios y las virtudes", Ed. Alfaguara, 2002)
Vínculos
Nombre genérico "Artocarpus" derivado del griego artos (pan) y karpos (fruto), en referencia a las propiedades nutritivas que se le atribuyen; el epíteto heterophyllus, de heteros (variado) y phyllon (hoja), de hojas variadas.
Yaca en Resistencia, Chaco (Mitre 700 / 800)
Familia: Moraceae.
"Moraceae: El nombre de la familia tiene su origen en en el género Morus L., que a su vez tiene su origen en una palabra de la lengua celta, que significa "negro", aludiendo al color de los frutos maduros de M. nigra L." (González, J.: “Explicación Etimológica de las Plantas de la Selva”, Flora Digital de la Selva, Organización para Estudios Tropicales).
Nombres comunes: Jaca; Jaka; Jaqueira; Árbol de Jack; Jackfruit; Panapen; Langka; Nangka.
El nombre inglés Jackfruit deriva del portugués jaka que a su vez deriva del malayo chakka.
En el sur de la India hay dos variedades: Koozha chakka (pulpa blanda) y Varika chakka (pulpa firme). (Jackfruits, Wikipedia).
Según referencias de la Agencia cubana de noticias su nombre en tongano: mei; en samoano y hawaiano: ulu; en tahitiano: uru; en maorí: kuru y en algunas partes de Centroamérica: mazapán.
Origen: India y Malasia
Es un árbol de porte mediano con tronco castaño grisáceo, liso en ejemplares jóvenes y rugoso en los adultos; tiene follaje verde oscuro de hojas ovaladas, más lustrosas en su cara superior y con nervaduras más claras.
Flores masculinas en espigas y femeninas agrupadas en inflorescencias globosas que surgen del tronco y ramas gruesas, para luego transformarse en frutos que, en sus zonas de origen, pueden llegan a superar los 20 kilogramos de peso.
Estos frutos son verdes en un comienzo y se tornan amarillentos al madurar, tienen su superficie cubiertas de pequeños conos.
En nuestra zona fructifica hacia fines de primavera.
"El árbol del pan"
*del "Libro de los pecados, los vicios y las virtudes", de Ana María Shua).
"En una choza, cerca del bosque, vivía un anciano con su hijo, su criado y su perro. Vivían humildemente y nadie se interesaba en ellos, pero eran amados por Brahma, el omnipotente, el compasivo.
Un día comenzó a caer una lluvia torrencial. Era la temporada lluviosa y parecía que iba a llover eternamente. Los habitantes de la choza no se atrevían a salir y todo lo que tenían para comer eran cuatro grandes hogazas de pan, con lo que esperaban subsistir hasta que terminase la lluvia.
Una de esas noches de tormenta, cuando los tres hombres estaban sentados a la mesa y el perro dormía a los pies del su amo, golpearon la puerta. Era un mendigo que rogaba un pedazo de pan. El viejo abrió el arca donde guardaba el pan y sin un instante de duda le dijo a su criado:
- Dale a ese hombre mi pan: es más desgraciado que yo, porque ni siquiera tiene techo que lo proteja. El dios Brahma velará por nosotros.
Con pocas ganas, el criado le entregó el pan al mendigo, que se alejó entre bendiciones.
Pasaron siete días de lluvia sin que amainara la tormenta y otra vez apareció el mendigo, miserable y hambriento.
- Dale tu pan - dijo el anciano a su criado - Él es viejo, tu eres joven. Ayuda al desgraciado y Brahma te premiará.
Con más alegría de la que tenía cuando entregó el pan de su amo, el criado dio su pan al mendigo.
Pero la lluvia no cesaba y cuando, transcurridos siete días, el vagabundo volvió a golpear la puerta de la choza, sus habitantes se encontraban en gran desolación y desamparo. Sin embargo, el anciano tuvo fuerzas para tomar una triste resolución:
- Dale a este hombre el pan de mi hijo - le ordenó - y demos gracias a Brahma que permite que un niño tan pequeño aprenda como ayudar al prójimo.
Pasaron otros siete días de angustia y nuevamente se presentó el mendigo, hambriento y desesperado.
- No nos queda más que el pan del perro - dijo el noble señor - Bendito sea Brahma, que nos permite aliviar con algo el hambre de nuestro hermano. Es justo que se sacrifique ahora el animal, aunque no pueda gozar de su buena obra.
Y cuando el servidor estaba entregando la hogaza de pan al mendigo, sucedió el milagro.
Los sucios ropajes cayeron y una luz resplandeciente lo envolvió. Y en lugar de un viejo cansado y miserable, apareció el dios Brahma, en su eterna fuerza y juventud.
El dios entregó al criado una semilla del tamaño de una almendra y le dijo:
- Que tu señor la siembre. Crecerá un árbol y sus frutos darán alimento. Quienes socorren al necesitado están bajo la protección de Brahma.
Cuando el criado relató lo que había sucedido, el anciano y su hijo corrieron a a la puerta, pero ya nada vieron. Sin embargo, la semilla estaba ahí. Y las grandes lluvias habían terminado.
El anciano sembró la semilla en lo alto de una colina, agradeciendo y adorando a Brahma.
Una lluvia cálida y bienhechora humedeció la tierra cuando fue necesario. Un tallo duro creció subiendo recto hasta formar un fuerte tronco. Y entre las ramas del árbol aparecieron cuatro panes blandos y sabrosos.
Así, como un don de Brahma, nació en la India el primer árbol del pan." (Shua, Ana María: "Libro de los pecados, los vicios y las virtudes", Ed. Alfaguara, 2002)
Vínculos
Artocarpus heterophylla Lam.: Libro de Víctor Manuel Patiño: "Plantas cultivadas y animales domésticos en América Equinoccial". Tomo 4 Plantas introducidas, Cap. VII. 102. Publicación digital en la página web de la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República
Aprovechamiento en la gastronomía de la yaca, difusión y otros usos, por Jorge Santoyo, México en monograías.com
Pan verde caído de un árbol, por Margarita Carmona, en Agencia cubana de noticias
Árbol del pan, por Joan Siza para Ecoaldea
Huy que lindo!! En nuestro último viaje a Andresito, Misiones, mi hijo Lucas se compró una plantita de Yaca...
ResponderEliminarLa plantó en una maceta en el patio..porque nos dijeron que era n árbol grande y no nos decidíamos dónde plantarla...
No duró mucho...la perra se la comió!!!!
en fin...
Saludos !!!
hola somos lucy y titor de iguazu Misones Arg. vivimos en una quinta llena de frutales y tenemos dos grandes arboles de yaca, trabajamos en turismo y nuestros visitantes quedan asombrados por esta fruta y sobre todo x su tamano, quienes quieran probar la YACA no dejen de visitar LA QUINTA DE TITOR, saludos.
ResponderEliminarMuy lindo todo, pero: En Argentina? COMO CONSIGO YACA?
ResponderEliminarSOY DIABETICO Y ME INETRESARIA.